La estabilización de la Torre de Pisa se ha realizado durante algún tiempo; En el día de San Ranieri (16 de junio) en 2001, el monumento fue devuelto a la comunidad. El 31 de diciembre del mismo año se disolvió el Comité Internacional, que obtuvo este resultado en más de 10 años de estudios, investigaciones e intervenciones. Los estudios realizados por el Comité, la comprensión gradual y laboriosa de los males de la Torre, la concepción y definición de las intervenciones de estabilización interina y final y, finalmente, su implementación han sido objeto de atención repetida de los medios y se han tratado en numerosos artículos. Publicaciones científicas publicadas en diversas oficinas especializadas.
Menos conocida, pero ciertamente no menos rica e interesante, ni menos importante fue la actividad de planificación ejecutiva y realización material de las intervenciones concebidas por el Comité, realizadas con compromiso, pasión y gran habilidad por parte del Consorcio de la Torre de Pisa, constituido por las Compañías. Trevi, Rodio, Italsonda, Ismes y Bonifica.
Ante la presencia de un doble riesgo (el de la geotecnia de un colapso y el colapso estructural de la mampostería) y de una situación que estaba empeorando, el Comité adoptó una estrategia de dos etapas: implementar de inmediato las intervenciones de estabilización interina, cuidando reversibilidad completa, con el fin de obtener la respiración para poder estudiar correctamente, y experimentar e implementar las intervenciones de estabilización definitiva.
En lo que se refiere al riesgo estructural, las intervenciones provisionales consistieron en el izado de algunas áreas de la Torre con mechones débilmente fingidos. Las intervenciones consistieron en la inserción de barras de acero inoxidable que conectan las paredes internas y externas de la mampostería, en la ejecución de inyecciones en las paredes y en el bastidor con alambres armónicos de acero inoxidable en la parte superior del primer orden y en el pie del segundo orden; Se han ocupado zonas muy limitadas de la torre.
En lo que se refiere al riesgo geotécnico, la intervención provisional consistió en la aplicación de un contrapeso a la Torre en el lado norte; el contrapeso consistía en una pila de lingotes de plomo, que alcanzaron un peso total de alrededor de 1,000 toneladas.
El Comité decidió reducir la inclinación de la Torre en aproximadamente medio grado, provocando un colapso del extremo norte de la fundación. Además de mejorar sustancialmente las condiciones de estabilidad de la cimentación, tal intervención también habría causado una reducción en el estado de estrés en la Torre y, por lo tanto, ayudaría a minimizar el refuerzo estructural necesario; además, habría sido totalmente respetuoso no solo de la integridad formal, sino también de la naturaleza material e histórica del monumento.
Proprietario | MINISTERIO DE PATRIMONIO Y ACTIVIDADES CULTURALES. |
Contratista | Proyecto Consorcio Torre de Pisa |
Duración de los trabajos | 1990 - 2009 |
El Comité ha examinado varios medios posibles para lograr tal resultado: la elección finalmente se ha basado en una intervención que induce el colapso del lado norte de la Torre al controlar de forma controlada pequeños volúmenes de tierra hacia el norte y por debajo del plan de Fundación (la llamada sub-excavación). Antes de operar en la Torre, se consideraba esencial realizar una prueba a gran escala en el sitio. Por esta razón, se decidió comenzar a operar en la Torre con una fase preliminar de excavación muy limitada, y solo después de haber instalado una estructura de defensa que pudiera hacer frente a eventos inesperados. Finalmente, se dijo que la sub-excavación real de la Torre se había subdividido como se dijo en una fase preliminar y una fase definitiva. Una vez que se completó la eliminación de todos los trabajos temporales, fue necesario prever la restauración y el refuerzo del Catino, operaciones que implicaron otra intervención estructural.
Durante la fase de trabajo se instaló un complejo sistema de monitoreo que permitió la detección continua de muchos parámetros relevantes para el control del monumento. Una vez que se han completado los trabajos, el sistema de monitoreo se ha modificado apropiadamente para adaptarlo a los diferentes requisitos del control del comportamiento de la torre a lo largo del tiempo.
Como resultado de la maleza, la Torre, al final de la intervención, había girado hacia el Norte, aproximadamente 1,800 segundos de arco (medio grado sexagesimal), correspondiente a un desplazamiento hacia el norte del séptimo marco de aproximadamente 43 cm y una disminución de A unos 17 cm del punto más septentrional del Catino. La rectificación, además de informar la pendiente de la Torre a lo que tenía hace unos 200 años, implica una reducción de la presión en el suelo hacia el sur, a fin de aumentar significativamente y asegurar el grado de seguridad del monumento contra la inestabilidad, casi hasta el final. Límite crítico antes del inicio de las obras. Después de una sub-excavación preliminar limitada realizada entre febrero y mayo de 1999, la excavación final comenzó en febrero de 2000 y terminó en enero de 2001; con más modestas intervenciones hasta el 6 de junio de 2001, cuando se completó la extracción de las baterías del tubo.